Por vía paterna nuestro bisabuelo, Cristóbal Ortega Priego, era ya vecino de Cabra (Córdoba) en 1926. Había sido labrador, propietario y alcalde de la vecina localidad de Nueva Carteya. Dos décadas más tarde adquirió una suerte de olivar en el sitio de Las Salinas, pago Cañada de las Urracas, término de Castro del Río (Córdoba). Su hijo (Antonio Ortega Merino) y nieto (Cristóbal Ortega Vergara) instalarían un molino en 1961 al objeto de aprovechar el rendimiento de una variedad, picudo, que lamentablemente nunca llegaría a comercializarse.

Por vía materna, nuestro tatarabuelo Fernando Pallarés Besora era ya un empresario dotado con el espíritu catalán emprendedor y de gran sentido práctico en los negocios cuando sentó las bases de la que sería una de las principales firmas exportadoras del sector oleícola español arribando a la ciudad de Cabra (Córdoba) en 1895. En 1904 fundó la sociedad mercantil colectiva Fernando Pallarés e Hijos con domicilio social en Tortosa (Tarragona) y dedicada a la fabricación y comercio de aceites de oliva y orujo gracias al capital desembolsado (800.000 pesetas) y sucursales establecidas en Borjas Blancas (Lérida) y Cabra (Córdoba) así como despacho en Marsella (Francia).

En 1916, dos de sus seis hijos, fundaron una sociedad mercantil colectiva. Con domicilio social en Cabra (Córdoba), el complejo aunaría ideas de eficacia y explotación plenas más sucursales en Nueva Carteya (Córdoba), Lucena (Córdoba), Martos (Jaén), Torredonjimeno (Jaén) y Fuente Piedra (Málaga) así como una red de agentes comerciales en Europa y América. Había nacido Pallarés Hermanos. En 1928 el accionista mayoritario, Luis Pallarés Delsors, refrendaba una escritura de unificación (grupo de fábricas, edificaciones e instalaciones, sitas en el Término Municipal de Cabra, Partido del Vado del Moro y Camino de Priego ocupando una extensión superficial de 31.218,05 metros cuadrados) para constituir una unidad orgánica subordinada a la explotación industrial.

Era el paso previo para la constitución de Pallarés Hermanos en sociedad anónima ampliando capital social (de 500.000 pesetas a 7.000.000 pesetas) y actividad. Tras el fallecimiento de Luis Pallarés Delsors y Francisco Pallarés Moreno, Carmen Pallarés Redondo quiso recobrar la empresa con la ayuda de algunos empleados de la Casa pero ya no pudo ser consumando así una suspensión de pagos (1976) que daría paso a la disolución y liquidación de Pallarés Hermanos en 2005.

Sobre nosotras

Legado Ortega Pallarés es una empresa enclavada en Cabra (Córdoba) puerta al parque natural de las Sierras Subbeticas.

Empresa fruto de una honda tradición familiar oleicola representada por la hermanas Ortega Pallarés en su quinta generación.

Es una empresa que aspira a un periodo de formación, crecimiento y plenitud sin determinación de limites.

Recolecta en sus fincas de olivar tradicional la aceituna con la que elabora aceite de oliva virgen extra en sus diferentes varidades, en particular Picudo.